El ataúd de la reina Isabel II, que falleció el pasado jueves en el castillo de Balmoral a la edad de 96 años, ha sido trasladado este lunes al palacio de Holyroodhouse, situado en Edimburgo (Escocia, Reino Unido).
El cortejo fúnebre ha durado más de seis horas, cubriendo una distancia de aproximadamente 290 kilómetros entre Balmoral y la capital escocesa. Miles de personas se acercaron a la procesión para despedirse de la que fuera monarca británica durante más de 70 años.
“Un momento triste y conmovedor cuando Su Majestad, la reina, deja a su amado Balmoral por última vez”, escribió en su cuenta de Twitter la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon. “Hoy, mientras hace su viaje a Edimburgo, Escocia rendirá homenaje a una mujer extraordinaria”, añadió.
Durante el acto se ha visto a Carlos III, de 73 años de edad, de pie junto a otros miembros de la familia real. El monarca encabeza la procesión del ataúd de la reina Isabel II.
El féretro permanecerá esta noche en el salón del trono antes de que lo lleven a la catedral de Saint Giles el martes por la tarde, lugar donde una gran multitud se congregó para presenciar la proclamación del rey Carlos III.
Posteriormente, los restos serán trasladados a Londres. Está previsto que el próximo 19 de septiembre se lleve a cabo el funeral de Estado de la difunta Isabel II en la abadía de Westminster, así como su entierro en la capilla de San Jorge, ubicada en el castillo de Windsor, en Inglaterra.