El Gobierno de EE.UU. anunció el lunes que alcanzó un acuerdo con el servicio de taxis Uber, en razón de una demanda presentada por el Departamento de Justicia del país en contra del cobro de cargos extra discriminatorios a pasajeros con discapacidades.
De acuerdo con el comunicado, Uber abonará a las cuentas de los más de 65.000 usuarios afectados el doble de las tarifas que pagaron por tardarse en subir a los vehículos que contrataron, lo que podría suponer millones de dólares. Además, pagará 1.738.500 dólares a más de 1.000 pasajeros que reclamaron y 500.000 dólares a otros afectados.
Como parte del acuerdo, el servicio de taxis también eliminará las tarifas de tiempo de espera a los usuarios discapacitados que sean certificados por la compañía.
Uber cobra un cargo extra a los pasajeros si el conductor tiene que esperar más de dos minutos para recogerlos. La demanda presentada por el Departamento de Justicia en noviembre de 2021 indica que la empresa viola la Ley para Estadounidenses con Discapacidades al aplicar costos adicionales a usuarios que, debido a sus condiciones, necesitan más tiempo para subir al vehículo.
“Las personas con discapacidad no deben sentirse como ciudadanos de segunda clase, ni ser castigadas por su discapacidad, que es exactamente lo que se hizo Uber con su política de tarifas de tiempo de espera”, puntualizó la fiscal general adjunta, Kristen Clarke. “Este acuerdo envía un fuerte mensaje a Uber y a otras empresas de transporte compartido de que tendrán que rendir cuentas si sus servicios discriminan a las personas con discapacidad”, agregó.