El FBI acusó al líder de una secta y miembro de la iglesia mormona (Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días), Samuel Rappylee Bateman, de contactos sexuales con menores de edad y poligamia con 20 mujeres, e incluso tratar de casarse con su hija, recoge Fox News.
Bateman, quien se autoproclamó profeta, “tuvo aproximadamente 50 seguidores y más de 20 mujeres, muchas de las cuales son menores de edad, en su mayoría menores de 15”, según se desprende de los materiales del FBI basados en el testimonio de una pareja familiarizada con el acusado. A finales del 2020, Bateman llegó a su casa con mujeres y niñas, presentándolas como sus esposas: la más joven tenía unos 9 años.
Asimismo, Bateman supuestamente hizo que sus seguidores, incluso menores, participaran en contactos sexuales con él, justificándolo por las “impresiones de la voluntad de Padre celestial”. Algunas de las mujeres eran hijas de los seguidores de Bateman.
En septiembre fue acusado por el gran jurado de traficar a menores de edad entre los estados de Arizona, Utah, Nevada y Nebraska entre mayo del 2020 y noviembre del 2021 para que prestaran servicios de carácter sexual. Según el FBI, Bateman organizó la llamada ‘Unión de hermanos’, una orgía de carácter ritual.
Además, el FBI reveló que en agosto Bateman, junto con sus cómplices, trató de obstaculizar la investigación mediante la destrucción de evidencias de sus crímenes.