Crystal Alden, una residente de Myrtle Beach, Carolina del Sur, EE.UU., que participó en las tareas de rescate de un gran tiburón blanco (‘Carcharodon carcharias’) que apareció varado en las aguas poco profundas de la playa a inicios de este mes, notificó este acontecimiento en sus redes sociales.
En su cuenta de Facebook escribió: “Hubo múltiples intentos de llevar al tiburón de regreso al océano, pero siguió volviendo a la costa y finalmente dejó de respirar”.
Por su parte, el Departamento de Recursos Naturales de Carolina del Sur (SCDNP), señaló que biólogos de la institución y científicos visitantes del Acuario de Georgia y del Ripley’s Aquariums de Toronto, Canadá, realizaron una necropsia del ejemplar hembra, de 3 metros de largo, pero no pudieron determinar la razón detrás de la varada ni la causa de la muerte.
“Una necropsia reveló nódulos en el bazo del tiburón, pero no una causa concluyente de enfermedad. Nuestros biólogos están enviando muestras de tejido para un análisis más detallado y, con suerte, obtener más información”, escribieron en su sitio oficial, en la mencionada red social.
El varamiento de esta hembra inmadura es un evento muy raro, según la publicación de SCDNP. “Si bien no es raro que grandes tiburones costeros, ballenas, delfines y tortugas marinas queden varados en la costa cuando están enfermos o heridos, un tiburón blanco varado en Carolina del Sur es inusual“, escribió el SCDNR. “Los tiburones blancos suelen ser solo visitantes de invierno en las aguas de Carolina del Sur”. Los representantes del SCDNP enfatizaron que este ejemplar no era un individuo previamente conocido (marcado), y no representaba una amenaza para los bañistas.