El enviado especial de la ONU para Yemen señaló este jueves que la tregua negociada entre el gobierno del país y los hutíes, que entró en vigor el 2 de abril pasado y vencerá el 2 de agosto, ha marcado el periodo más largo de calma relativa en más de siete años de conflicto y ha disminuido considerablemente el número de víctimas civiles.
En un comunicado, Hans Grundberg afirmó que esta pausa en las hostilidades se ha mantenido en gran medida gracias al compromiso de las partes, aunque reconoció que ambos actores han expresado su preocupación por presuntas violaciones e incidentes en múltiples frentes.
Grundenberg informó que se encuentra conversando con las partes para apoyar la implementación de todos los elementos de la tregua y explorar las posibilidades de prorrogarla más allá del 2 de agosto.
Fomentar la confianza y avanzar hacia la paz
“Una tregua extendida y ampliada aumentaría los beneficios para el pueblo yemenita. También proporcionaría una plataforma para fomentar una mayor confianza entre las partes e iniciar discusiones serias sobre las prioridades económicas y de seguridad del país”, argumentó.
El diplomático detalló que en el frente económico se deben abordar los ingresos y salarios, y en el de seguridad, un alto el fuego.
“En última instancia, el objetivo es avanzar hacia un arreglo político que ponga fin al conflicto de manera integral”, apuntó.
Con respecto a las violaciones de la tregua, recordó que las partes tienen la obligación de proteger a los civiles en virtud del derecho internacional humanitario.
Agregó que su oficina trabaja a través del Comité de Coordinación Militar para facilitar el diálogo y apoyar la distensión y explicó que el propósito es que las partes establezcan una mesa conjunta que se encargue de investigar oportunamente todas las denuncias de incidentes.
Los puntos de la tregua
Cuando se negoció la tregua, las partes propusieron abrir caminos en Taiz y otras provincias. La propuesta de la ONU incluía tres, dos planteados por los hutíes y uno por la sociedad civil. El gobierno aceptó esta propuesta, pero los hutíes no.
Recientemente, las partes anunciaron su intención de abrir algunos caminos de forma unilateral.
En este sentido, Grundberg consideró que las acciones unilaterales por sí solas “no son suficientes para garantizar el paso seguro y sostenible de los civiles por las carreteras que cruzan los frentes bajo el control de diferentes partes”.
“Las partes precisan negociar, coordinarse y comunicarse entre sí. Seguiré trabajando para acercar a las partes a fin de llegar a un acuerdo para abrir carreteras clave de manera sostenible y segura en Taiz y otras provincias. Esto seguirá siendo una prioridad para este periodo de tregua y cualquier extensión futura del mismo”.
Otro término de la tregua fue permitir dos vuelos comerciales por semana entre Sana’a, Amman y El Cairo, un total de 36 vuelos en los cuatro meses negociados.
Hasta el momento, se han operado 20 vuelos de ida y vuelta entre Sana’a y Amman y un vuelo de ida y vuelta entre Sana’a y El Cairo, que han transportado a más de 8000 pasajeros.
La oficina del enviado explora opciones para conectar el aeropuerto de Sana’a con más destinos como parte posible de una tregua extendida más allá del 2 de agosto.
Según la tregua, también ingresarían 36 barcos de combustible a Hodeida. Hasta el momento, han atracado 26 petroleros con 720.270 toneladas de carga.
“Dado que los precios mundiales del combustible están aumentando, es más importante que nunca garantizar que este bien básico llegue a Yemen para respaldar los servicios esenciales”, recalcó Grundberg, subrayando que una renovación de la tregua permitiría su entrada regular y oportuna.
Lapso transformador
El enviado especial advirtió que el paso de siete años de guerra a un estado de relativa calma supone múltiples desafíos, y reconoció que ha habido falencias en la implementación de las estipulaciones de la tregua.
Sin embargo, ha sido un lapso transformador para Yemen y ha hecho una diferencia tangible en la vida de las personas, aseguró
“El pueblo yemenita y la comunidad internacional quieren y esperan que la tregua se implemente, renueve y fortalezca. Espero que las partes se comprometan constructivamente y acepten los beneficios que una tregua extendida y ampliada puede ofrecer a la población. Deben estar a la altura de las circunstancias y no perder esta oportunidad”, enfatizó Grundberg.
Apoyo para la recuperación
Por otra parte, la Comisión Económica y Social de la ONU para Asia Occidental lanzó hoy en Amman una iniciativa para apoyar la recuperación en Yemen durante una evento que reunió a numerosos representantes de organizaciones regionales e internacionales que respaldan al país árabe.
El objetivo principal del proyecto es allanar el camino para un diálogo nacional que elabore un plan de recuperación y desarrollo sostenible basado en el consenso.
La iniciativa también busca fortalecer las instituciones públicas y prepararlas para el proceso de recuperación, brindando asistencia técnica y solidificando las alianzas.